26 abril 2008

Facebook es heavy!!!!


Llevo apenas dos meses utilizando Facebook y ya tengo muchos amigos, encontré a más de alguno perdido en el tiempo y me di el lujo de rechazar a varios que veo diariamente y que lo que menos quiero es verlos en la pantalla de mi PC.

Heavy, heavy... ¡heavy!

Acá están las fotos de mis amigos al día de hoy, familia, alumnos de la unab, contactos de trabajo y más...

Flashback

Mirar hacia atrás un minuto es revivir historias del pasado, sumando un análisis que permite comprender el por qué de tantas cosas, de tantas vivencias.

Hoy me toco dar una charla a estudiantes de Ingeniería Industrial de la USACH, en la que presenté "10 pasos para emprender".

Preparando esa exposición me di cuenta del gran camino recorrido. Que en lo que a emprendimiento se refiere, ya pasé la mitad y que es imposible volver sobre los pasos dados. Sentí orgullo y felicidad por tener algo que decir a las nuevas generaciones.

Fue muy especial encontrarme en la misma universidad en la que estuve 4 años estudiando una carrera que nunca terminé (Ing en Minas) y que por tanto tiempo pensé un tiempo inútil perdido.

Gracias a mi paso por esa carrera, conocí lo que eran las matemáticas, lo que más tarde me sirvió para dedicarme al periodismo económico. Pero sirvió también para darme cuenta de lo que quería para mi vida laboral, lo que NO TENÍA QUE HACER en la vida y eso ayudó para entender lo que sí debía hacer.

Hay mucho que contar sobre este tema y seguramente será algo que desarrollaré en los próximos posteos. Por lo pronto, dejo como testimonio de hoy 26 de abril del año 2008, que soy un tipo feliz, seguro del camino escogido para mi vida laboral y, más que nunca, comprometido con jamás fallarle a ese instinto aventurero y emprendedor hacia los negocios.

07 abril 2008

El fin de una etapa

Cuando tenía 10 años, en casa de mi hermana, me senté en una berma con seis amigos más (entre ellos mi sobrina, Claudia, que entonces tenía 12) y nos pusimos a conversar cómo nos veíamos para el año 2000.

No recuerdo qué dije yo, pero me llamó la atención que todos dijeron que para entonces estarían casados y, la mayoría, al menos con un hijo. Para mi, ese tema no era relevante, ni siquiera me veía pololeando... y sin embargo unas semanas después sería un "niño casado".

Llegó el 2 mil y lo único que acumulaba en mi vida amorosa eran pololas, pero nunca estube cerca de pensar en el matrimonio. El 10% era por miedo y el 90% por no encontrar a nadie con quien quisiera compartir mi vida, mi cama, mis sueños y mi futuro.

Los años venideros no fueron distintos, hasta que llegó Pamela, esa chica chilena-ecuatoriana que había conocido en los noventas en la parque donde pasé mi adolescencia, pero que casi 15 años después era como verla por primera vez. El amor inquieto de entonces ya no estaba. Ahora era otro. Era del alma.

Nos pusimos a pololear casi terminando el 2006, cuando mi empresa pasaba por la crisis más feroz de su existencia y el sueño de estudiar Teatro se esfumaba por falta de motivación. "Todo mal", excepto ella, un rayito tibio de sol entre tanta oscuridad, pero eso bastó para contagiarme de energía y seguridad, hasta salir adelante. Su optimismo no tiene parangón y más tarde descubriría que nada puede borrar el brillo de sus ojos y la sonrisa de su rostro.

El tiempo fue pasando, pero no en vano. Evolucioné como nunca antes en una relación de pareja, aprendí a ser yo y no tuve miedo a que no me aceptara tal cual soy. No apresuré los pasos en nada, no exigí, no levanté castillos en el aire y me dediqué a conocerla, a escucharla y comprenderla.

Ya al mes sentía que ella era importante, probablemente la mujer de mi vida, y desde que cumplimos un año de pololeo me animé a aceptarlo como un hecho y a decírselo sin temor a crear expectativas. Durante el último verano comencé a hablar de matrimonio y ya en marzo le dije que quería casarme con ella.

El viernes 4 de abril conversamos con su familia y les dijimos que lo nuestro "iba en serio" y que nos casaríamos este año. Ayer domingo 6, hicimos lo propio con mi familia que se reunió para celebrar el cumpleaños de mi madre y ya quedó todo sentenciado. Todos están felices, todos saben que lo nuestro es de verdad.

[Antes de escribir este posteo repasé lo existente en mi Blog y me sorprendió cómo uno va evolucionando y lo afortunado que soy en tener esta "memoria pública" que obliga a hacerme cargo de todo lo escrito hacia atrás. Son casi tres años de vida que se plasman en la Web y espero que sean muchos más, pues no tengo nada que ocultar y mucho que decir]

Estimados: me caso con Pamela este año. Sepan todos que estoy feliz y seguro de la decisión, que estoy completamente libre de presiones y muy lejos del enamoramiento que hace ver todo color de rosa. Es justamente esa actitud "aterrizada" la que me permite ver los defectos de ella, los míos y los de ambos, y aún así, estoy plenamente seguro que esta vez si deseo compartir mi vida, mi cama, mis sueños y mi futuro con esta mujer. Con Pamela.

La etapa que comenzó en la berma de aquél pasaje, hoy se cierra.

02 abril 2008

Mi segundo primer martes

Los "First Tuesday" volvieron gloria y majestad, tal como desembarcó la nueva etapa de las empresas en Internet tras la debacle del año 2 mil. Sólo unos cuantos sobrevivimos.

Como profesor universitario de ramos tecnológicos ligados al periodismo, una de las clases iniciales que siempre incluyo a pesar del paso del tiempo, es el inicio y muerte de la primera etapa de las empresas basadas en internet. Y es que como pocos, puedo contarla en primera persona, ya que participé activamente en la búsqueda de capital para levantar un proyecto que por entonces recién se estructuraba: DiarioPyme.

¿Quién recuerda "La Brujula", el primer buscador chileno? ¿O "El Panal", un portal que agrupaba a diversos sitios web en una única comunidad? ¿Y quién de los mayorcitos de 30 no tuvo un correo electrónico en Latinmail o Mixmail? El año 2000 fue el de las "Punto Com", donde tipos como Wenceslao Casares vendía el sitio "Patagon" en millones de dólares, mientras en los EE.UU. se daba inicio a Nasdaq, la bolsa de valores exclusiva para empresas digitales.

De pronto, todo estalló. "Explosión de la Burbuja", se llamó el proceso en que las empresas web que hablaban de ventas millonarias se sinceraban y dejaban los términos como e-commerce, business to business y otras mezclas, en una ilusión. Casi todo era mentira y las Punto Com no encontraban el modelo comercial que las financiara. ¡Bum! la burbuja explotaba dejando a unos cuantos jóvenes millonarios y a otras tantas empresas en todo el mundo desconfiadas.

En Chile, el año dos mil fue el que vio nacer y morir los "First Tuesday", que siguiendo una moda internacional, congregaba el primer martes de cada mes a los inversionistas que observaban el proceso de Internet desde lejos con los jóvenes que buscaban financiar sus ideas.

En esas reuniones se cerraron negocios de diversa índole que no viene al caso comentar, hasta que a fines de ese año la última reunión ya acusaba la explosión del sueño dorado en todo el mundo.

Tuvo que pasar 8 años para que recién ahora se pueda reestablecer un mayor grado de confianza en Internet. La masividad de su uso y acceso, el desarrollo de la tecnología en general (celulares, televisión digital y más), casos exitosos de empresas basadas 100% en Internet, la experiencia de una debacle total, y una renovación parcial de la cúpula empresarial, son en un análisis muy personal algunos de los principales motivos que trajeron de vuelta el tema "web" al mundo de los negocios.

Esta vez Chile parece ser menos cauto y dispuesto a correr más riesgos que la primera vez. El relanzamiento de los First Tuesday, que en sus dos primeras ediciones congregaron a más de 400 personas, demostró que otra vez estamos en la cresta de la ola y que al parecer ya aprendimos a "surfear" en ellas.

Este martes 1 de abril, junto a tres o cuatro tipos más (además de los organizadores), éramos los únicos que nos repetíamos el plato del año dos mil, cuando entonces éramos jóvenes en busca de experiencia. Hoy, en cambio, son otros los jóvenes que nos buscan para aprender. Personalmente me sentí un "ganador", un guerrero que sobrevivió con su diario electrónico (DiarioPyme, por cierto) entre miles que bajaron los brazos y hoy miran con recelo esta nueva oportunidad que la economía mundial le brinda a Internet.