Mi último post fue justo antes del dieciocho del 2011 y de esas fiestas puedo agregar que se mantuvieron en el estilo de siempre: comidos, regados, bailados y disfrutados junto a la familia y los amigos. De allí hasta noviembre fue un trabajo arduo de sol a sol, pero que rindió enormes frutos económicos y de aprendizaje. Para celebrar todo lo conseguido, agarré esposa, hijo y maletas para irnos unos días a Ecuador, donde vive el papá de Pam.
Allá lo pasamos increíble: conocer a mi suegro, disfrutar de la hospitalidad de Mariuxi, dar una charla de emprendimiento en la U. de Casagrande, recorrer Jipijapa, Puerto López y Montañita, el estadio de Barcelona (uno de los 3 más grandes de sudamérica), comer dos platos nuevo e hipercalóricos cada día, acariciar las Tortugas de Galápagos y hasta sentarme en una plaza junto a cientos de iguanas...
Volvimos a Chile justo antes de Navidad. El mismo 24 mi viejita tuvo un accidente casero y hasta esta fecha anda complicada de un hombro. Parece que nada la liberará de entrar al quirófano, pero por suerte será algo menor que no reviste riesgo vital.
El verano fue leeeeento. Harto estar en familia y disfrutar de algunas arrancadas a la playa, para disfrutar en familia y con el Tatán que cada día crece y se transforma en un niño inteligente y feliz.
Y en ese contexto de "felicidad" se ha construido mi 2012. ¿Fin de mundo? Era cierto, se terminaron muchos paradigmas y dogmas de mi vida que no me dejaban alcanzar la plenitud en distintos aspectos que bien valen otro post a futuro.
En lo familiar puedo reconocer que la relación de pareja se fortalece, el rol de padre es un constante aprendizaje,y el nexo con mi madre, hermanos y la adoptada familia de Pam es cada vez mayor y mejor. En lo laboral han ocurrido varios eventos que están marcando una nueva etapa, mucho más sólida y trascendente: Las clases en la UNAB y U Mayor fluyen mejor, el desarrollo y crecimiento de NewsHolding y toda mi red de medios crece a diario, mis charlas están cada vez mejor elaboradas tanto en contenido como en puesta en escena, y hay diversos proyectos con mucha pinta de concretarse en los próximos meses.
Pero quizá en lo personal, en el YO interno es donde más cambios --y todos positivos--, observo y vivo. Gran parte de ese desarrollo personal ha estado impulsado por tres personas claves: Mi esposa, que me está recordando y reforzando siempre lo que soy y lo que valgo; mi amigo Lakes que ha exacerbado mi creatividad gracias a su disposición a jugar en serio, materializar las ideas y a disfrutar de cada cosa que se hace; y gracias también a Jaime De Casacuberta que partió hace 4 años siendo un integrante del Consejo Editorial de DiarioPyme y que hoy es un gran amigo.
Jaime es uno de los más importantes coach en temas de liderazgo, inteligencia emocional y PNL de Chile, pero es su dimensión vivencial la que más me ha impactado: las historias en su Harley, los 50 países recorridos, la superación de problemas familiares, la búsqueda de la razón de su existencia (y encontrar esa respuesta!) y la exactitud para precisar cada mensaje.
No dejaré a Fernando, el padrino de Sebastián fuera de este recuento: un tipo noble, el más noble que jamás hubiese conocido, a tal punto que esa virtud opaca los defectos que varias veces nos hacen discutir.
A pocos días de que acabe agosto y vuelva otra vez la primavera. quise dejar el mensaje de que he crecido. Y dejar el testimonio de lo feliz y pleno que me siento. Al leer hacia atrás los post de este blog, es imposible no detenerse a pensar en cómo avanzas de años y también de desarrollo.
Acá algunas fotos para reforzar esta radiografía actual de mi paso por la vida.
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