09 junio 2009

Hijo mío...

A pocos instantes de tu llegada a este mundo, quiero dejar un testimonio imposible de ordenar, de hacer coherente... son mil cosas, pero una resulta la más importante: te amo.
Hijo mío, suerte en la vida, no es fácil, pero es hermosa. Estarás siempre con tus papás, con un entorno de alegría y amistad, con el ritmo de la naturaleza y con una buena estrella que siempre te acompañará.

No falta nada y yo estoy con los brazos estirados esperándote para abrazarnos.

No hay comentarios.: