13 mayo 2009

Tranquilo papá

A 4 semanas del "Gran Día" no oculto los nervios de ser papá de un varoncito. ¿Cómo pasamos de 9 meses a uno? ¡No queda nada!

Es una emoción contenida y natural, donde la atención está en ella más que en él, como debe ser. Sé que miles como yo son padres a cada minuto en el mundo de igual cantidad de guaguas que llegan al planeta tierra a escribir su destino, pero es imposible no sentirse "especial".

Mi madre me tuvo cuando ya vivía más allá de las cuatro décadas, tras haber superado 3 meses en coma debido a una operación mal realizada, y tras dos años de pololeo y posterior matrimonio con mi padre que, tras enviudar, vio en mi madre una nueva oportunidad de amar.

No tenía por dónde!!!!! Pero llegué y, a través de mis 36 años de vida, soy capaz de permitir la llegada de un nuevo ser. ¿Cómo no sentirse especial?

Quedan 4 semanas para que con Pamela, mi esposa, revisemos los últimos detalles de nuestras historias, cerremos algunos capítulos y nos presentemos frente a este hijo como unos padres hechos y derechos, capaces de apoyarlo en su crecimiento.

En el vientre de Pamela está nuestro hijo. En mi estómago, en cambio, sólo hay nervios y ansiedad por escuchar ese primer llanto que te grita bien fuerte "AQUÍ ESTOY... LLEGUÉ!

2 comentarios:

RODRIGO SILVA ARAVENA dijo...

Feliz cumpleaños mopilas. Tus columnas siempre son un aporte.

P Moletto dijo...

Felicitaciones, que todo salga bien en el parto..... ya veras lo que es bueno PAPA!!!

Sabras lo que es una que ya no duermas profundo ni de corrido, sabras lo que es ver la sonrisa de tu hijo y sus primeros pasos.

Pero sobretodo sabras ser Hijo..... porque la unica manera de aprender a ser hijo, es siendo padre.

salu2